Tecnología de conservación de alimentos: microbiología aplicada
Introducción
La tecnología de conservación de alimentos es un campo de la microbiología aplicada que busca prevenir el deterioro de los alimentos y prolongar su vida útil. La conservación de los alimentos es importante no solo para garantizar su disponibilidad durante todo el año, sino también para evitar el desperdicio de alimentos y reducir los costos asociados.
Fundamentos de la conservación de alimentos
La conservación de los alimentos se basa en la inhibición o eliminación de los microorganismos que pueden causar su deterioro. Los microorganismos que pueden estar presentes en los alimentos incluyen bacterias, hongos y levaduras, que pueden crecer y multiplicarse en condiciones adecuadas.
La inhibición de los microorganismos se puede lograr reduciendo el contenido de humedad, acidificando el alimento, reduciendo la temperatura o agregando conservantes. La eliminación de los microorganismos se puede lograr mediante la aplicación de calor, radiación o productos químicos.
Reducción de la humedad
La mayoría de los microorganismos requieren agua para crecer y multiplicarse. Por lo tanto, la reducción del contenido de humedad en los alimentos puede inhibir su crecimiento. La deshidratación es una técnica ampliamente utilizada para la conservación de frutas, verduras, carne y pescado. La deshidratación se puede lograr mediante el secado al sol, la deshidratación por aire caliente o la liofilización.
Acidificación
La acidificación es otra técnica utilizada para la conservación de alimentos que consiste en agregar ácido al alimento para reducir el pH. Los microorganismos no pueden crecer y multiplicarse en ambientes ácidos, por lo que la acidificación puede inhibir su crecimiento. Los alimentos ácidos incluyen conservas de frutas, verduras y encurtidos. La acidificación también se utiliza en la producción de queso, yogurt y otros productos lácteos.
Refrigeración y congelación
La reducción de la temperatura también puede inhibir el crecimiento de los microorganismos. La refrigeración y la congelación son técnicas ampliamente utilizadas para la conservación de alimentos. La refrigeración reduce la velocidad de crecimiento de los microorganismos, mientras que la congelación detiene completamente su crecimiento y multiplicación. La refrigeración se utiliza para la conservación de carnes, aves, pescados, productos lácteos, frutas y verduras. La congelación se utiliza para la conservación de carnes, aves, pescados y productos horneados.
Adición de conservantes
Los conservantes son sustancias que se agregan a los alimentos para prevenir o retardar el crecimiento de los microorganismos que causan el deterioro. Los conservantes pueden ser naturales o sintéticos. Los conservantes naturales incluyen sal, vinagre, azúcar y ácido ascórbico. Los conservantes sintéticos incluyen nitratos, nitritos, sulfitos y benzoatos.
Tecnologías emergentes en la conservación de alimentos
Altas presiones hidrostáticas
La tecnología de altas presiones hidrostáticas (APH) es una técnica emergente utilizada para la conservación de alimentos. La APH se basa en la aplicación de presiones elevadas (hasta 800 MPa) a los alimentos, lo que causa la muerte de los microorganismos presentes y prolonga la vida útil del alimento. La APH se utiliza en la conservación de carnes, pescados, frutas y verduras.
Pulsos de luz
Los pulsos de luz son otra técnica emergente utilizada para la conservación de alimentos. La tecnología de pulsos de luz involucra la exposición del alimento a pulsos de luz intensos y breves, lo que causa la muerte de los microorganismos presentes. Los pulsos de luz se utilizan en la conservación de productos lácteos, bebidas y frutas y verduras.
Plasma frío
La tecnología de plasma frío es otra técnica emergente utilizada para la conservación de alimentos. La tecnología de plasma frío se basa en la producción de especies reactivas de oxígeno y nitrógeno en el alimento mediante la aplicación de pulsos eléctricos. Estas especies reactivas causan la muerte de los microorganismos presentes y prolongan la vida útil del alimento. La tecnología de plasma frío se utiliza en la conservación de frutas, verduras, carnes y pescados.
Conclusiones
La tecnología de conservación de alimentos es un campo en constante evolución y desarrollo. El uso de técnicas emergentes como altas presiones hidrostáticas, pulsos de luz y plasma frío pueden proporcionar beneficios significativos en términos de calidad, seguridad y vida útil del alimento. La aplicación rigurosa y adecuada de estas técnicas puede contribuir en gran medida a garantizar la disponibilidad de alimentos seguros para el consumo humano durante todo el año.